La cancelación de un despliegue indica al Gestor de configuración que suponga que un intermediario nunca responderá a un despliegue pendiente.
Es posible que necesite cancelar un despliegue debido a que el Gestor de configuración sólo permite que haya un despliegue en curso para cada intermediario y en cualquier momento. Si por algún motivo un intermediario no responde a una petición de despliegue, las peticiones posteriores no podrán alcanzar el intermediario porque, para el Gestor de configuración, todavía hay un despliegue en curso.
Si después un intermediario proporciona una respuesta a un despliegue pendiente que ha sido cancelado, el Gestor de configuración hace caso omiso de la respuesta y se produce una incoherencia entre lo que se está ejecutando en el intermediario y la información que proporciona el Gestor de configuración.
Debido a este riesgo de incoherencia, cancele un despliegue sólo como último recurso, y solamente si está seguro de que un intermediario no podrá nunca procesar una petición de despliegue anterior. Sin embargo, antes de cancelar un despliegue, puede eliminar manualmente los mensajes de despliegues pendientes para asegurar que no se procesen.