Las acciones legales se gestionan en el nivel de caso. La gestión de acciones legales incluye normalmente la solicitud de una audiencia a través de una petición legal, dirección de la audiencia y llegar a una determinación a partir de ella. La determinación de una audiencia puede dar como resultado un ordenamiento jurídico.
Por ejemplo, la organización recibe un informe sobre un niño abandonado que se ha encontrado vagando por las calles llorando. Un asistente social trae al niño a la oficina de la organización y averigua que su nombre es Javier y que no se conoce el nombre de su padre. Javier le dice al asistente social que estaba con su madre Carmen, quien le había dejado solo y se había ido con su tío. La organización no logra localizar a la madre del niño. En el proceso, localiza a la tía de Javier que vive en una provincia vecina. La tía quiere recoger a Javier y la organización estima que esta es la respuesta más apropiada. La organización entrega la custodia temporal a la tía Alicia en el tribunal. El tribunal planifica una audiencia de custodia temporal para el día siguiente como resultado de la petición. Las dos acciones legales las graba la organización y las asocia una con otra.
El proceso de gestión de las acciones legales es completamente flexible y puede personalizarse en función de los requisitos de la organización. Por ejemplo, se puede crear un ordenamiento jurídico directamente desde una petición legal sin que la organización tenga que crear entre una y otra una audiencia legal. Este capítulo proporciona una descripción general de la gestión de petición, audiencia legal y ordenamiento jurídico.