Derivación para recomendación (Admisión)

Las agencias de bienestar infantil deben responder a las cuestiones de maltrato y negligencia infantil. El proceso de admisión requiere recibir y examinar informes de posibles lesiones para determinar si es necesaria una intervención. La información capturada durante la admisión incluye una descripción narrada de lo que le ha sucedido al menor, las lesiones o daños que el menor ha sufrido, información acerca del menor, los padres o cuidadores, los testigos potenciales o contactos colaterales, la ubicación actual y la seguridad del menor. Muchas veces, una familia puede estar enfrentándose a problemas adicionales, tales como problemas de vivienda, empleo, violencia doméstica o problemas emocionales que ocasionan un estrés adicional. Estos factores pueden afectar la posibilidad de la familia de proporcionar un entorno seguro y estable para los menores. Garantizar la seguridad y el bienestar de los menores y las familias es la misión principal de las agencias de bienestar infantil globalmente. Las agencias de bienestar infantil deben proporcionar al público medios accesibles y fiables para que puedan informar sobre las alegaciones de malos tratos. Los trabajadores de la sección de admisión deben registrar la información puntualmente y con precisión. La información de admisión puede haber sido transmitida por las personas interesadas en el bienestar del menor y por personas que conocen la situación y están preocupadas por la misma. Los informantes pueden ser profesionales que trabajan directamente con la familia o el menor, tales como profesores o médicos, u otras personas, como miembros de la familia, amigos o vecinos.